No te fijes en los defectos, fíjate en la forma en la que te saca una sonrisa. No te guíes por el que dirán, guíate por tus sentimientos y por como se te aceleran las pulsaciones cuando estás a su lado. Dejemos a un lado los complejos, el físico, el cuerpo y fijémonos en el interior. Ya se que es muy típico eso de 'la belleza está en el interior' pero es que es cierto, porque con el paso del tiempo la belleza se distorsiona y ya sólo queda la esencia de cada persona. También es verdad que no todo el mundo cree en los 'para siempre' o en los 'comieron perdices y fueron felices para siempre' es más, yo tampoco creo que existan, pero en lo que sí creo es en que hay que valorar a las personas por como son, por como te tratan, por como te valoran ellas a ti y dejar a un lado el envoltorio que es el físico de cada uno, porque como se dice hay lobos con piel de cordero. Tenemos que valorar cada detalle, tenemos que saber mirar más allá de lo que creemos ver, tenemos que darnos cuenta de que el cuerpo es tan sólo el recipiente de nuestra esencia, de nuestro auténtico yo.
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